Todo acerca de la traducción de software y sus ventajas
A la traducción (o localización) de software se la considera un tipo de traducción técnica. Esto es así porque esta disciplina de traducción se enfrenta a lenguajes muy específicos y complejos, también denominados jergas. La traducción de software trabaja con lenguajes informáticos muy concretos que no todo el mundo comprende y conoce.
Por este motivo, resulta necesario que el profesional encargado de esta clase de trabajos posea un conocimiento profundo de estos lenguajes. Lo fundamental para una buena traducción de software será, por lo tanto, la experiencia del traductor en estas materias tan específicas.
Localización más que traducción
El software lo forman todos los componentes intangibles de un ordenador, es decir, todos los programas y procedimientos necesarios para hacer viable la realización de una tarea específica.
Generalmente, en el sector no se habla de traducción de software, sino de “localización de software”. La diferencia entre una cosa y otra es pequeña, aunque sustancial. La localización no solo se ciñe a la traducción literal de mensajes de un idioma a otro, sino que también atiende a los componentes culturales que rodean a cada idioma.
Además de bien traducidos, los mensajes informáticos deben estar bien adaptados a cada cultura. Es este trabajo de adaptación cultural lo que se denomina como
“localización”. Una traducción localizada mejorará significativamente la experiencia de los usuarios con el programa informático en cuestión, la app o el videojuego.
¿Con qué se suele trabajar en la traducción de software?
Dentro del mundo de la informática están continuamente generándose documentos y programas que demandan ser traducidos. Por norma general, todos estos textos, documentos, archivos y páginas web se confeccionan inicialmente en inglés, y es a partir de este idioma desde donde después se traduce a otras lenguas como el español, el chino o el francés.
Pero la traducción y localización de software no implica únicamente la traducción del software en sí, sino que también engloba otras tareas y gestiones como la traducción de cuadros de diálogo, manuales de usuario, menús y mensajes de error o la traducción de la interfaz gráfica que ve el usuario cuando utiliza un programa o una app para el móvil.
Por este motivo, los traductores profesionales de software deberán estar familiarizados con la terminología de los distintos sistemas operativos más habituales en la industria informática, ya sea Mac, Windows, Linux o Android (este último cuando hablamos de teléfonos móviles).
Dificultades y ventajas de la localización de software
Garantizar que el código permanezca intacto es una de las mayores complicaciones que acarrea la traducción y localización de software. Para lograr que esto ocurra, lo recomendable es extraer todo el contenido traducible antes de comenzar las tareas de traducción y localización,
Llevando a cabo este sencillo gesto evitaremos modificar el código involuntariamente, algo que sería fatal para el buen funcionamiento del programa. De todos modos, y sobre todo para evitar estos percances, puede resultar muy útil que el traductor esté familiarizado con ciertas nociones básicas de programación, tan solo para prevenir que se introduzcan símbolos o signos que estropeen el código.
Para finalizar, en este post hemos querido reunir una serie de ventajas que tiene la traducción y localización de software, ventajas que muchas veces suelen pasarse por alto:
1. Aumento de la cuota de mercado: más versiones localizadas de tu programa, web online, app o videojuego significará más clientes potenciales, lo que hará que tu empresa se expanda hacia nuevos países y culturas.
2. Una mejor comprensión de tu producto: que los usuarios puedan comprender en profundidad las funcionalidades del servicio de software que ofreces ayudará a que estos utilicen el producto correctamente, que extraigan de él todas sus posibilidades. Con un programa o aplicación bien traducida y localizada la experiencia del usuario resultará especialmente satisfactoria y fructífera.
3. Mejor experiencia de cliente, menos costes de asistencia técnica: si los usuarios comprenden el software o programa echando mano de las instrucciones y manuales incluidos en él no se hallarán en la situación de tener que acudir al servicio de asistencia técnica, algo que siempre termina generando pesadez e insatisfacción.